El presidente Andrés Manuel López Obrador admitió este miércoles que el Tren Interurbano México-Toluca es una “obra muy complicada“.
A pesar de la complejidad de su construcción, el mandatario prometió concluir el proyecto antes del fin de su Administración.
Puntualizó que actualmente se está terminando de construir la estación Santa Fe, “aunque aún resta trabajo por hacer“.
“Ya se puede llegar hasta la estación Santa Fe que se está construyendo, pero nos falta todavía. Es una obra bastante complicada, no fácil. Se están haciendo varios puentes, viaductos, se va avanzando”, admitió en su conferencia matutina.
El mandatario también anunció que el viernes 24 de mayo supervisará los avances del Tren Insurgente, como también se le conoce al Tren Interurbano, y otros proyectos de transporte en la región, incluyendo el Trolebús de Chalco y el Tren del AIFA a Lechería.
Cabe recordar que en febrero pasado, López Obrador había dicho que el Tren Interurbano, un sistema ferroviario que abarca 60 kilómetros y reducirá el tiempo de viaje a 45 minutos entre ambas ciudades (Toluca-CDMX), sería inaugurado en agosto.
No obstante, en los últimos días la construcción ha enfrentado desafíos, incluyendo accidentes recientes, como la volcadura de una perforadora el 3 de abril y el colapso de una lanzadora de dovelas el 17 de abril.