El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que su administración no dejará “problemas heredados” al gobierno que lo suceda, destacando que se están estableciendo las bases para una transformación profunda en el país.
Durante su conferencia de prensa matutina, el mandatario subrayó los logros de su gobierno en la reducción de la pobreza y desigualdad, asegurando sentirse satisfecho con estos resultados.
“No vamos a dejar pendientes de ese tipo, van a poder gobernar con apego a la legalidad, haciendo valer un auténtico Estado de Derecho, porque lo que había, y aún prevalece en el Poder Judicial, es un Estado de chueco, no de Derecho, pero tenemos que ir limpiando, la vida pública del país, purificando la vida pública de México y ni un paso atrás, ni para tomar impulso”, señaló.
Asimismo, hizo un llamado a su sucesor para que evite retroceder en los avances logrados.
López Obrador también mencionó algunos de los desafíos que enfrentó al inicio de su mandato, como la evasión fiscal de grandes corporaciones y la situación legal de la planta de Vulcan en Quintana Roo.
En ese sentido, hizo énfasis en las reformas realizadas para asegurar que todos paguen impuestos justamente, incluyendo la modificación constitucional que prohíbe la condonación de impuestos a grandes empresas.
“Antes el presidente podía condonar impuestos, pero eso se acabó. A esos grandes empresarios les metimos algunos goles”, comentó.
“No va a quedar nada, no, no, no, ningún problema, al contrario, va a quedar ya desbrozado el camino, el cómo hacerle. Quienes me sustituyan van a poder decir, como decía el maestro Reyes Heroles en una comparecencia, ‘no es conmigo, es con la ley’”, concluyó.